miércoles, 31 de agosto de 2016

Miércoles de la Vigésima Segunda Semana del Tiempo Ordinario

«Todos cuantos tenían enfermos de diversas dolencias se los llevaban; y, poniendo Él las manos sobre cada uno de ellos, los curaba» Lucas 4,40

Las personas que se encuentran con Jesús le escuchan hablar del reino de Dios, se dejan tocar y servir por él. Probablemente sus vidas fuesen también muy rutinarias. Sin embargo, Jesús les ayuda a ver toda la novedad que Dios trae.

Dios les Bendiga.

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