«Señor, yo no soy digno de que entres en mi casa; con que digas una sola palabra, mi criado quedará sano» Mt 8,8
El evangelio de hoy es un diálogo entre dos personas. Entre Jesús y el centurión. Quiero que mi oración sea siempre así, un diálogo con Jesús. Él me escucha, me conoce, sabe cómo soy. Termino mi oración hablando con Jesús, escuchando a Jesús.
Feliz semana.
Dios les bendiga.
No hay comentarios:
Publicar un comentario