martes, 10 de julio de 2018

Martes de la Decimocuarta Semana del Tiempo Ordinario

«Rueguen, por lo tanto, al dueño de la mies que envíe trabajadores a sus campos» Mateo 9,38

Señor, quiero que resuene en mis oídos y en mi corazón, ese deseo tuyo de encontrar colaboradores en tu tarea de sanar, de cuidar, de levantar a tanta gente postrada en las cunetas de los caminos del mundo. Quiero ofrecerte en mis manos para ayudarte hacerlo. Mis pies, para caminar a tu lado, mi capacidad y ternura para sentir tu misma compasión. Amén.

Dios nos bendiga.

No hay comentarios:

Publicar un comentario