«Sean misericordiosos, como su Padre es misericordioso» Lucas 6,36
El Evangelio denos habla sobre el amor y el perdón de Dios para cada uno de nosotros, pero además son una invitación a que cada uno de como nosotros amemos incluso a nuestros enemigos y les perdonemos siempre. Pidamos al Señor que haga nuestro corazón semejante a de él que siempre amoroso y misericordioso. Amén.
Dios nos bendiga.
No hay comentarios:
Publicar un comentario