sábado, 30 de abril de 2022

Llamados a confiar en Jesús para no tener miedo a las tormentas

 Sábado de la Segunda Semana de Pascua

«Pero él les dijo: “Soy yo, no tengan miedo» Juan 6,20

Hoy Jesús nos recuerda que Él está con nosotros, que no hay nada a que tener miedo. En medio de las tormentas que vivimos a diario como a los discípulos en el Evangelio de hoy, a nostros se nos invita a reconocer que Jesús es verdaderamente humano y totalmente divino, que sólo Él nos puede llevar a la seguridad de orilla cuando lo necesitamos. Pidamos la gracia de que durante estos 50 días de Pascua, mantengamos en nuestros corazones que Jesús es humano y completamente divino y que elige usar ese poder para venir a nosotros en nuestra necesidad. Amén

¡Feliz fin de semana!
Dios nos bendiga.




viernes, 29 de abril de 2022

Llamados a compartir el alimento físico y espiritual

 Memoria de Santa Catalina de Siena

«Enseguida tomó Jesús los panes, y después de dar gracias a Dios» Juan 6,11

Sólo en Jesús podemos satisfacer nuestras necesidades físicas y espirituales. El milagro de Jesús alimentando a miles usando los cinco panes y los dos peces que le dio un niño después de decir la acción de gracias, es un signo de la Eucaristía. Así como Jesús alimentó a la multitud que lo seguía así continúa hoy alimentándonos en la Eucaristía. El mundo en el que vivimos hoy necesita ser alimentado, tanto física como espiritualmente, por eso pidamos la gracia por intercesión de Santa Catalina de Siena de que el Señor nos ayude a estar dispuestos a permitirle obrar a través de nosotros para proveer a los necesitados el alimento físico y espiritual como lo hizo ella.
¡Santa Catalina de Siena, ruega por nosotros!

Dios nos bendiga.





jueves, 28 de abril de 2022

Llamados a dejarnos guiar por el Espíritu Santo

Jueves de la Segunda Semana de Pascua

«Aquel a quien Dios envió habla las palabras de Dios, porque Dios le ha concedido sin medida su Espíritu» Juan 3,34

Hoy Jesús nos recuerda que Dios no raciona el don del Espíritu ofreciéndolo en pequeñas cantidades, sino que Dios derrama generosamente sus dones, ofreciéndonos todo lo que necesitamos para enfrentar los desafíos u oposición en nuestras vidas. Solo debemos confiar y nuestro generoso Señor nos dará las palabras, la fuerza, la sabiduría y el amor que necesitamos para ser sus manos y pies en nuestro mundo. Pidamos hoy la gracia al Espíritu Santo de reconocer que el Padre nos ama por medio de su Hijo Jesús quien nos lo ha entregado todo a nosotros para que nosotros hagamos lo mismo. 

Dios nos bendiga.





martes, 26 de abril de 2022

Llamados a vivir la vida nueva que Jesús nos ofrece

Martes de la Segunda Semana de Pascua

«Para que todo el que crea en él tenga vida eterna» Juan 3,15

En el evangelio de hoy Nicodemo, un líder religioso judío que parece abierto a las enseñanzas de Jesús, se encuentra con él de noche, sin multitudes alrededor porque está realmente interesado en saber lo que Jesús quiere decir cuando enseña sobre el amor y el cuidado del Padre por nosotros. Hoy Jesús nos anima como a Nicodemo a usar nuestra fe y razón, para ganar más entendimiento y vida eterna. Pidamos hoy la gracia de ser audaces como Nicodemo para comprender más profundamente cuánto nos ama Dios y la vida eterna que nos ofrece en su Hijo Jesús. Amén.

Dios nos bendiga.




lunes, 25 de abril de 2022

Llamados a evangelizar

 Fiesta de San Marcos, Evangelista

«Vayan por todo el mundo y prediquen el Evangelio a toda creatura» Marcos 16,15

Como a los apóstoles hoy el Señor nos llama a la evangelización teniendo confianza en Aquel en quien creemos y en cuyo nombre podemos actuar. Si seguimos las orientaciones del Señor podremos hacer grandes cosas en su nombre. Pidamos en esta fiesta de San Marcos la gracia de confiar en el Señor y de difundir su palabra humildemente a los demás.  San Marcos evangelista, ruega por nosotros.

Feliz semana.
Dios nos bendiga.




domingo, 24 de abril de 2022

Llamados a ser misericordiosos

Homilía Segundo Domingo de Pascua Domingo de la Divina Misericordia
24 de abril de 2022

“Reciban el Espíritu Santo. A los que les perdonen los pecados, les quedarán perdonados.” – Jn 20,19-31

Queridos hermanos y hermanas, ¡Bendito Domingo de la Divina Misericordia! Hoy, mientras continuamos celebrando la gloriosa resurrección del Señor, recordamos de manera especial su inimaginable don de misericordia. En el evangelio de hoy hemos escuchado como Jesús se aparece a sus discípulos ofreciéndoles la paz y mostrándoles sus heridas. Luego sopla sobre ellos, diciendo: “Reciban el Espíritu Santo. A los que les perdonen los pecados, les quedarán perdonados”.

Queridos hermanos y hermanas, por el don del Espíritu Santo cada uno de nosotros estamos unidos a Cristo; el Espíritu Santo que habita entre nosotros y dentro de nosotros desde el día de nuestro Bautismo, nos anima a poner en práctica nuestra fe en Jesús Resucitado pero también nos ayuda que la vida divina eche raíces en nosotros, que crezca, que florezca y de frutos para la gloria de Dios y la salvación de nuestra alma y la del mundo entero.

Queridos hermanos y hermanas, en este Segundo Domingo de Pascua celebramos la Misericordia de Dios con esta fiesta especial, que tiene su origen en las revelaciones de Jesús a la monja polaca Santa María Faustina Kowalska. En ese día se abren las fuentes de la inmensa y tierna misericordia del Señor. Hoy Jesús derrama todo un océano de gracias sobre aquellas almas que se acercan a la fuente de su misericordia. En su amorosa bondad, Jesús nos dice exactamente cómo obtener estas gracias: acercándose a la “fuente de la misericordia”, confesándose y recibiendo la sagrada Comunión. Nosotros sabemos que solo Dios puede perdonar nuestros pecados; los pecados son, ante todo, una ofensa contra él; pecado es todo lo que hacemos sabiendo que está mal hacerlo… pero en el Evangelio de hoy hemos escuchado a Jesús dando a sus Apóstoles el poder de perdonar los pecados en su nombre, en el sacramento de la reconciliación, “Reciban el Espíritu Santo. A los que les perdonen los pecados, les quedarán perdonados”.

Queridos hermanos y hermanas, cuando nos acercamos al Sacramento de la Confesión… el sacerdote por Jesús y en su nombre, dice al final de la confesión: “Yo os absuelvo”. No sólo somos perdonados de nuestros pecados, sino que somos librados. Somos libres de esas cadenas del pecado que nos atan, cadenas que nos impiden amar a Dios como debemos. Jesús dio a los Apóstoles y sus sucesores, nuestros sacerdotes y obispos, esa autoridad, la autoridad de perdonar, de reconciliar, de ofrecer misericordia en su persona y su nombre… Porque Jesús sabía que nuestros corazones anhelaban escuchar esas palabras: Te perdono… Te absuelvo…

Queridos hermanos y hermanas, si uno se fija bien en la imagen de la Divina Misericordia, basada en las visiones de Santa Faustina, podremos ver que Jesús esta con el pie izquierdo ligeramente adelantado al otro. Él está saliendo hacia nosotros, para encontrarnos dondequiera que estemos, así como vino al Aposento Alto para encontrarse con los discípulos y luego regresó cuando Tomás estaba allí con ellos. Dice el Evangelio que los discípulos tenían miedo… que las puertas estaban cerradas. Pero Jesús es paciente y misericordioso y viene trayendo paz, “La paz esté con ustedes”; la misma paz que Jesús quiere ofrecernos hoy a cada uno de nosotros… en esa situación que estamos viviendo… esa paz que tanto necesita el mundo hoy… Hoy Jesús viene a nosotros a abrir los cenáculos de nuestros miedos y de nuestra incredulidad, porque siempre quiere darnos otra oportunidad… porque Jesús es el Señor “de las otras oportunidades”: siempre nos da otra, siempre.

Queridos hermanos y hermanas, cualquier pecado que esté encerrado en nuestros corazones hoy, cualquier pecado que nos detenga, nos ate y nos impida amar a Dios como debemos, debemos invitar a Jesús a que entre en ese lugar, esa situación de nuestra vida. Permitámosle a Jesús que venga y nos diga: “La paz esté con ustedes”. “La paz esté contigo”.  Y encontrémonos con Él, con Jesús en el confesionario, donde él nos espera, anhelando sumergirnos a cada uno de nosotros en las llagas de su Divina Misericordia, para que también nosotros compartamos esa Misericordia Divina con los demás especialmente con las personas que vivimos a diario…

¡Jesús, en ti confío! ¡Jesús, en ti confío!¡Jesús, en ti confío! Amén.






sábado, 23 de abril de 2022

Llamados a prácticar y predicar el Evangelio de Jesucristo

Sábado de la Octava de Pascua

«Vayan por todo el mundo y prediquen el Evangelio a toda creatura» Marcos 16,15

Hoy Jesús nos llama a dar testimonio de su amor, sin importar quién sea el oyente. Las palabras del Señor son verdad y vida, por lo tanto no debemos temer ser valientes para ponerlas en práctica y compartirlas con los demás porque como bautizados estamos llamados a llevar el Evangelio a todos las personas sin distinción de que sean amigos o no, de que tengamos éxito o no. Pidamos hoy al Señor la gracia de dar testimonio de él a pesar de nuestras debilidades y limitaciones.

¡Feliz Pascua de Resurrección!
Dios nos bendiga.




viernes, 22 de abril de 2022

Llamados a reconocer y escuchar a Jesús

 Viernes de la Octava de Pascua

«Echen la red a la derecha de la barca y encontrarán peces» Juan 21,6

Hoy Jesús nos recuerda que él siempre está a nuestro lado para decirnos que hacer. Muchas veces en la vida buscamos algo durante mucho tiempo y solo para encontrarlo justo en frente de nosotros. Los discípulos no reconocen a Jesús por lo que es, como no lo hicieron la primera vez que se encontraron con él, pero lo escuchan, porque su consejo siempre ha sido sólido. Hoy Jesús está presente entre nosotros aunque no lo podamos ver físicamente para decirnos que hacer, para encontrarlo y reconocerlo solo debemos prestar atención y escucharlo. Pidamos la gracia de reconocer y escuchar a Jesús en todas las cosas que vivimos a diario especialmente en nuestro prójimo.  

¡Feliz Pascua de Resurrección!
Dios nos bendiga.




jueves, 21 de abril de 2022

Llamados a no tener miedo a dar testimonio de Jesús

Jueves de la octava de Pascua

«No teman; soy yo. ¿Por qué se espantan?» Lucas 24,38

En Jesús Resucitado Dios nos ha llamado a la salvación a no tener miedo. Con la resurrección del Señor Dios ha cumplido la promesa anunciada por los profetas y nos ha salvado, solo debemos arrepentirnos de nuestros pecados y creer en Jesús como nuestro Señor y dar testimonio de Él ante las demás personas de la vida nueva que Él nos ofrece. Pidamos la gracia de estar abiertos a la vida nueva que Dios nos ofrece como discípulos de su Hijo Jesús porque somos los que él ha hecho, y Él nos ha hecho para sí mismo, para darlo a conocer a los demás.

¡Feliz Pascua de Resurrección!
Dios nos bendiga.




miércoles, 20 de abril de 2022

Llamados a reconocer a Jesús Resucitado

 Miércoles de la Octava de Pascua 

«¡Con razón nuestro corazón ardía, mientras nos hablaba por el camino y nos explicaba las Escrituras!» Lucas 24:32 

El Señor verdaderamente ha resucitado y se nos revela como a los discípulos en camino a Emaús. Aunque discípulos estaban confundidos y tristes después de la muerte de Jesús, prestan atención al peregrino que va con ellos por el camino, Jesús parte el pan, se los da y ellos lo reciben, solo en ese momento sus corazones arden por lo que Dios ha hecho con ellos y pueden reconocer que Jesús ha resucitado. Pidamos la gracia de que Dios abra los ojos de nuestro corazón para reconocerlo hoy en su palabra, los sacrametos  y en nuestro prójimo y asi siempre estar atentos solo a él.

¡Feliz Pascua de Resurrección!
Dios nos bendiga.





martes, 19 de abril de 2022

Llamados a compartir la alegria de la resurrección del Señor

Martes de la Octava de Pascua de la Resurrección del Señor

«Mujer, ¿por qué estás llorando? ¿A quién buscas?» Juan 20,15

El amor de Cristo por nosotros nos transforma. María Magdalena fue la primera de los discípulos de Jesús en experimentar su amor transformador, aunque ella estaba muy triste por la muerte del Señor, pero cuando se encuentra con el Señor resucitado se llena de alegría y hace lo que Jesús le dice, anunciar su resurrección y próxima ascensión a los discípulos. Pidamos la gracia de ser transformados para compartir la alegría de pertenecer a Cristo como lo hizo María para compartir su amor dondequiera que nos envíe por el bien del mundo. ¡Feliz Pascua de Resurrección!

Dios nos bendiga.




lunes, 18 de abril de 2022

Llamados a dear testimonio de Jesús Resucitado

 Lunes de la Octava de Pascua de la Resurrección del Señor

«Vayan a decir a mis hermanos que se dirijan a Galilea. Allá me verán » Mateo 28,10

Durante esta Octava de Pascua de la Resurrección del Señor somos llamados a proclamar la esperanza gloriosa que viene a través de su vida, muerte y resurrección. Al igual como María Magdalena y los primeros discípulos del Señor desde la realidad que vivimos somos llamados a dar testimonio de nuestra fe en Jesús Resucitado a difundir su Evangelio. Pidamos al Espíritu Santo la gracia para que podamos proclamar con nuestras palabras y obras la esperanza gloriosa que viene a través de la vida, muerte y resurrección de Jesús. ¡Feliz Pascua de Resurrección!

Dios nos bendiga.




sábado, 16 de abril de 2022

LA ESPERANZA ILUMINA EL SÁBADO SANTO

LA ESPERANZA ILUMINA EL SÁBADO SANTO

Puede sucedernos que el Sábado Santo sea el día del Triduo Pascual que más descuidamos, porque estamos ansiosos por pasar de la cruz del Viernes Santo, al aleluya del Domingo de Resurrección. Para que esto no nos ocurra, podemos fijarnos en las mujeres que acompañaron a la Virgen en todo momento. Para ellas, como para nosotros, era la hora más oscura… Pero en esta situación las mujeres no se quedaron paralizadas, no cedieron a las fuerzas oscuras de la lamentación y del remordimiento, no se encerraron en el pesimismo, no huyeron de la realidad. Ellas Realizaron algo sencillo y extraordinario: prepararon en sus casas los perfumes para el cuerpo de Jesús… Sin saberlo, esas mujeres preparaban en la oscuridad de aquel sábado el amanecer del “primer día de la semana”, día que cambiaría la historia.


Jesucristo yace hoy en el sepulcro. Manos amigas lo han colocado con cariño en aquel lugar, propiedad de José de Arimatea, cercano al Calvario. ¿Dónde están los apóstoles? Nada nos dicen los evangelios, pero tal vez al atardecer de aquel sábado fueron llegando uno a uno hasta el Cenáculo, donde días atrás… se habían congregado con el Maestro. ¡Cuánto desánimo en sus conversaciones! Habían traicionado a Jesús. El desaliento de los apóstoles fue muy grande que de seguro pensaron en abandonarlo todo y volver a las cosas de antes, como si los últimos tres años hubieran sido tan solo un sueño… Sin embargo, en el silencio que envuelve el Sábado Santo, embargados por el amor ilimitado de Dios, vivimos en la espera del alba del tercer día… el alba del triunfo del amor de Dios… el alba de la luz que permite a los ojos del corazón ver de un modo nuevo la vida… las dificultades… el sufrimiento… La esperanza ilumina nuestros fracasos… nuestras desilusiones… nuestras amarguras… que parecen marcar el desplome de todo… Amén 


 

viernes, 15 de abril de 2022

Llamados a responder con amor al amor de Dios

Homilía Viernes Santo de la Pasión del Señor
15 de abril de 2022

“Jesús dijo a su madre: Mujer, ahí está tu hijo. Luego dijo al discípulo: Ahí está tu madre.” – Jn 18,1-19,42

Queridos hermanos y hermanas, en la cruz, Jesús rompe las cadenas del pecado, de Satanás y de la muerte para siempre y para todos las personas sin distinción. La celebración del Viernes Santo de la Pasión del Señor es una invitación a venerar el madero de la cruz conscientes de la profundidad del amor de Dios por nosotros, hasta la muerte de su Hijo en la cruz, a nosotros sólo queda hacernos las siguientes preguntas. ¿Qué hemos hecho nosotros para merecer a un Dios tan amoroso que da la vida de su Hijo único por nuestra salvación? ¿Qué podemos ofrecerle a cambio de este maravilloso sacrificio que Cristo ha hecho por nosotros?

Queridos hermanos y hermanas, en cuanto a la primera pregunta, la respuesta es “absolutamente nada”. Nosotros NO hemos hecho nada para merecer el amor de Dios y, de hecho, a lo largo de la historia de la humanidad hemos intentado casi todas las formas de rechazar ese amor que Dios nos tiene, incluso hasta llegamos a matar a su Hijo unigénito. Si somos honestos no merecemos nada. Dios nos da su amor, su misericordia y su gracia, gratuitamente y sin reservas. El Viernes Santo, este amor se revela en una plenitud física y su encarnación a través de la recitación de la Pasión Narrativa del Evangelio de Juan.

Queridos hermanos y hermanas, saber que Juan fue el único Apóstol que no abandonó a Jesús en el Calvario quizás explica por qué su historia se parece más a la de un testigo presencial. Jesús sabe lo que le va a pasar. Porque entiende que esta es la voluntad del Padre, Jesús no muestra miedo, solo fe y determinación frente a la tortura y la ejecución. Siglos antes del nacimiento de Jesús, Isaías en la primera lectura de hoy dijo que nuestro Salvador sería como un “siervo sufriente” llevado al matadero. Por terrible que pareciera, tenía que ser así, para que Jesús pudiera romper las cadenas del pecado, Satanás y la muerte, para siempre y para todas las personas sin distinción. El profeta Isaías dijo que los reyes se quedarían sin palabras ante el inmenso sufrimiento de Jesús.

Queridos hermanos y hermanas, esto nos lleva a la segunda pregunta: ¿Qué podemos nosotros ofrecer a cambio? “Quedarse sin palabras” no es realmente una opción. Por supuesto, podemos encontrarnos asombrados, y tal vez sin palabras ante Dios, pero nuestra misión es dar testimonio de todo lo que hemos visto y oído. Debemos proclamar las Buenas Nuevas de salvación, no quedarnos parados mirándolas, ser meros espectadores como le sucede a muchos ante este drama de dolor que viven nuestros hermanos y hermanas en Ucrania, el dolor, el sufrimiento, la muerte de ellos debemos hacerla nuestra. En Cristo, vemos cuánto nos ama Dios. Él nos ama hasta la muerte. Él pide el regalo de nuestra vida, nuestro amor y nuestra fe a cambio, hoy es un buen día para hacerlo.

María, Reina de la Paz, protégenos de la guerra!





miércoles, 13 de abril de 2022

Llamados a poner en las manos de Dios nuestras lucha o sufrimiento

 Miércoles de la Semana Santa 

«Yo les aseguro que uno de ustedes va a entregarme » Mateo 26,21 

Ya hoy concluimos el tiempo de Cuaresma y el Evangelio nos presenta a Jesús completamente consciente de lo que le va a suceder, Jesús está comprometido a soportar lo que venga porque Él confía en su Padre, hasta ese ultimo momento cuando uno de sus apóstoles lo traicionó . Pidamos la gracia de poner en las manos de Dios cualquier lucha o sufrimiento que experimentamos en nuestras vidas para recibir las bendiciones que vendrán de ellos. ¡María, Reina de la Paz, protégenos de la guerra! ¡María, Reina de la Paz, protégenos de la guerra!

Feliz Semana Santa.
Dios nos bendiga.







martes, 12 de abril de 2022

Llamados a encontrar confianza, esperanza y Consuelo en Jesús

Martes de la Semana Santa

«No cantará el gallo antes que tú me hayas negado tres veces» Jn 13,38

Hoy Jesús como le dijo a sus discípulos nos dice a nosotros que oremos para que, con la gracia de Dios, nos mantengamos firmes frente a la tentación y las pruebas. Conociendo bien a sus discípulos, Jesús les anticipó que se quedarán cortos. Puede que nosotros también nos sintamos confiados en nuestra virtud, tan seguros como Pedro de que nos mantendremos firmes cuando enfrentemos nuestro momento de la verdad. Pidamos hoy la gracia de encontrar esperanza y consuelo en las palabras que Jesús nos ofrece para ser reconciliados y perdonados por Dios. ¡María, Reina de la Paz, protégenos de la guerra!

Feliz Semana Santa.
Dios nos bendiga.





lunes, 11 de abril de 2022

Llamados a honrar al Señor con nuestro ejemplo, palabras y acciones

 Lunes de la Semana Santa

«Déjala. Esto lo tenía guardado para el día de mi sepultura» Juan 12,7

El acto de Maria de ungir los pies del Señor es un símbolo muy conmovedor que nos recuerda que Jesús es el Mesías, el Ungido enviado por Dios para traernos la salvación y la verdadera libertad interior. Hoy y siempre estamos llamados a honrar a Jesús como nuestro Mesías y Señor con todo lo que hacemos a diario con amor y gratitud a Dios. Pidamos la gracia de ser luz para las naciones, a hablar del amor de Dios con nuestro ejemplo, nuestras palabras y nuestras acciones.
¡María, Reina de la Paz, protégenos de la guerra!

Feliz Semana Santa.
Dios nos bendiga.









domingo, 10 de abril de 2022

Llamados a vivir en el amor y la obediencia de los hijos de Dios

Homilía Domingo de Ramos de la Pasión del Señor
10 de abril de 2022

“¡Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu! Y dicho esto, expiró.” – Lc 22,14-23,56

Queridos hermanos y hermanas, en este Domingo de Ramos volvemos la mirada y abrimos el corazón para contemplar el corazón de nuestra fe: Cristo murió y resucitó para que podamos conocer la plenitud de su amor, ahora y siempre. El incomprensible amor de Dios por nosotros, entró en el mundo como un pequeño y vulnerable niño, que creció hasta convertirse en un hombre, un hombre que aceptó sin miedo, con humildad y desinteresadamente el plan que Dios tenía para él.

Queridos hermanos y hermanas, es difícil escuchar la historia de lo que Jesús soportó e incluso imaginar el dolor y la humillación que él sintió. El Evangelio de la Pasión que hemos escuchado hoy nos muestra la violencia que sufrió nuestro Señor, las palabras como las que lo despreciaron y se burlaron, como lo azotaron y lo crucificaron. La misma gente que lo había alabado cuando entró en Jerusalén debido a sus palabras y los milagros que realizó se convirtieron en una multitud escandalosa, que lo maltrataba y lo escupía gritándole ¡crucifícalo, crucifícalo!El Señor fue insultado todo el tiempo mientras se arrastraba hacia el Calvario. Jesús se sacrifica en este último acto de amor, para mostrarnos que nada es más grande que el amor de nuestro Padre. En su sufrimiento y sacrificio, Jesús nos muestra que el último acto de amor es el perdón, “Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen”. Este acto de amor se contraponen a lo que dijeron los soldados que lo crucifican: “¡Que se salve a sí mismo si este es el Mesías de Dios, el elegido!»

Queridos hermanos y hermanas, pero como podemos nosotros hoy responder al sufrimiento y muerte de Jesús, imitándolo. Para imitar a Jesús primero debemos recordar quiénes somos y cuál es nuestra misión. Usted y yo somos hijos de Dios destinados a vivir la vida al máximo. Somos sus discípulos llamados a difundir la Buena Nueva de su amor y misericordia. En esta Semana Santa aunque muchos tengamos que cumplir con nuestras obligaciones y responsabilidades personales, tomemos tiempo para reflexionar sobre lo que significa ser hijos de Dios y discípulos del Señor para nuestras vidas. Puede significar poner las necesidades de los demás antes que las nuestras, o ser más amables con aquellos que no conocemos bien. Puede significar dejar a un lado el orgullo o el resentimiento para sanar relaciones rotas, incluso perdonar a los demás, aunque hayamos sufrido a causa de sus acciones. Y definitivamente ser hijos de Dios y discípulos del Señor significa ser humildes y obedientes a Dios, confiando en que Él nos sostendrá en los sacrificios que hacemos y las acciones que hacemos para compartir su amor con los demás.

Queridos hermanos y hermanas, que durante esta Semana Santa, caminemos con Cristo cada día para crecer en nuestra capacidad de imitarlo en amor y humildad, especialmente el mundo hoy necesita del amor y la humildad de los cristianos… Y mientras nos preparamos para participar en la mesa donde Jesús se nos ofrece nuevamente, oremos por la gracia que nos fortalecerá y nos sostendrá en este caminar, rumbo hacia la Pascua…

¡María, Reina de la Paz, protégenos de la guerra!





sábado, 9 de abril de 2022

Llamados a perseverar en el amor del Señor

 Sábado de la Quinta Semana de Cuaresma 

«Conviene que un solo hombre muera por el pueblo y no que toda la nación perezca» Juan 11,50

En el Evangelio de hoy los sumos sacerdotes y los fariseos convocaron al Sanedrín para deliberar qué hacían con Jesús porque ellos estaban más preocupados por perder sus comodidades y estatus social, que perder sus almas y por eso deciden que Jesús tiene que desaparecer. lo que sucedió después es lo que celebramos en la Semana Santa la conmemoración de la Pasión, Muerte y Resurrección del Señor. Durante esta Cuaresma que está terminando tal vez no hayamos cumplido con todas nuestra metas o promesas cuaresmales, pero sí debemos estar seguros que durante este tiempo de gracia el Señor ha estado con nosotros para ayudarnos llegar a la Pascual. Pidamos hoy la gracia de perseverar en el amor y la entrega del Señor a la voluntad de su Padre.
¡María, Reina de la Paz, protégenos de la guerra!

Feliz sábado.
Dios nos bendiga.




 

viernes, 8 de abril de 2022

Llamados a reconocer a Jesús como nuestro salvador

Viernes de la Quinta Semana de Cuaresma

«¿Por cuál de esas obras queréis apedrearme?» Juan 10,32

Hoy como en el tiempo de Jesús muchos no aceptan la verdad acerca de Él y algunos eligen simplemente ignorar a Jesús, otros lo rechazan abiertamente y otros quieren convertir a Jesús en alguien que se ajuste a sus elecciones de vida y eso lleva a la infelicidad porque no estamos viviendo de acuerdo con la verdad. Pidamos la gracia de permitir que Dios nos haga como él, que podamos reconocer que Jesús es nuestro salvador que Él no vino a exaltarse a sí mismo, sino a levantarnos a la diestra del Padre, donde viviremos y reinaremos con él por toda la eternidad.
¡María, Reina de la Paz, protégenos de la guerra!

Dios nos bendiga.





jueves, 7 de abril de 2022

Llamados a escuchar a Dios con un corazón abierto

Jueves de la Quinta Semana de Cuaresma

«El que es fiel a mis palabras no morirá para siempre» Juan 8,52

Durante la Cuaresma estamos llamados a escuchar con atención a Dios a través de la oración. Para escuchar a Dios debemos estar atentos y tranquilos para que su palabra entre en nuestra alma y así responder como él espera de nosotros. En el tiempo de Jesús muchos endurecieron sus corazones a la gracia de Dios al negar la bondad que se les ofreció gratuitamente a través de sus palabras y acciones. Pidamos siempre tener un corazón abierto, humilde y dispuesto a aprender y escuchar la voz del Señor que ofrece vida y amor. ¡María, Reina de la Paz, protégenos de la guerra!

Dios nos bendiga.





miércoles, 6 de abril de 2022

Llamados a vivir en la libertad de los hijos de Dios

 Miércoles de la Quinta Semana de Cuaresma

«Ustedes serán verdaderos discípulos míos si perseveran en mi palabra» Juan 8,31

Jesús mismo nos ha dicho, conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres. La Cuaresma es un tiempo que nos invita a unir nuestra libertad a la voluntad de Dios, porque ser verdaderamente libres es vivir de la manera que Jesús nos ha enseñado, porque cuanto más hacemos el bien, más libres somos, más nos parecemos a Dios. Pidamos hoy la gracia de crecer en la verdad durante estos días de Cuaresma y así vivir en la libertad que Dios nos ha dado por medio de su Hijo Jesús y así vivir nuestra identidad como hijos de Dios. ¡María, Reina de la Paz, protégenos de la guerra!

Dios nos bendiga.





martes, 5 de abril de 2022

Llamados a mirar a la cruz y a Cristo sobre ella

Martes de la Quinta Semana de Cuaresma

«Cuando hayan levantado al Hijo del hombre, entonces conocerán que Yo Soy» Juan 8,28

La gloria de Jesús ha sido revelada en la cruz. Los que esperaron la llegada del Mesías en el tiempo de Jesús nunca imaginaron que una ejecución criminal sería el momento decisivo en la vida de ese Mesías, por eso todo el mirar con fe a Cristo en la cruz y reconoce que Él es el enviado del Padre, será salvado de sus pecado por Él. Pidamos la gracia de mirar a la cruz y a Cristo sobre ella y recordemos que Dios siempre proporciona un camino de regreso a Él, incluso si no siempre es de la manera que esperábamos.
¡María, Reina de la Paz, protégenos de la guerra!

Dios nos bendiga.




lunes, 4 de abril de 2022

Llamados a dejarnos iluminar por Jesús

Lunes de la Quinta Semana de Cuaresma

«Yo soy la luz del mundo; el que me sigue no caminará en la oscuridad y tendrá la luz de la vida» Juan 8,12     

Para los fariseos el mensaje de Jesús era difícil de creer, por eso cuestionaron la integridad de Jesús y no creyeron en sus palabras prefiriendo vivir en la oscuridad de sus razonamientos. Hoy también es probable que algunos de nosotros también dudemos de Jesús o de nosotros mismos. Al ver solo nuestro quebrantamiento, nos resulta más fácil escondernos en la oscuridad que apropiarnos de nuestras fallas. Pidamos la gracia de dejar que nuestras dudas y pecados sean iluminados por la luz de Jesús en quien solo podemos encontrar misericordia. ¡María, Reina de la Paz, protégenos de la guerra!

Feliz semana.
Dios nos bendiga.




domingo, 3 de abril de 2022

Llamados a recibir y vivir la misericorsia del Señor

 Domingo de la Quinta Semana de Cuaresma

«Y Jesús le dijo: Tampoco yo te condeno. Vete y ya no vuelvas a pecar» Juan 8,11

Hoy Jesús nos recuerda que todos necesitamos de la misericordia y el perdón del Señor porque todos en algún momento de nuestra vida cuando caemos en el pecado y este se vuelve público ante los demás nos podemos sentir expuestos, vulnerables y solos. Pero al igual que la mujer del evangelio de hoy nuestra vergüenza nos ayuda a reconocer la inmensa misericordia del Señor. Pidamos hoy la gracia de encontrar la salvación en la dulce y amorosa misericordia del Señor que se nos ofrece durante este tiempo de Cuaresma a través del Sacramento de la Confesión. ¡María, Reina de la Paz, protégenos de la guerra!

Feliz domingo.
Dios nos bendiga.




sábado, 2 de abril de 2022

Llamados a beber de Jesús el agua viva

Sábado de la Cuarta Semana de Cuaresma

«Nadie ha hablado nunca como ese hombre» Juan 7,46

Hoy Jesús nos recuerda que él es el agua viva que puede vencer las divisiones. Hoy el Señor nos sigue enseñando a través de su palabra y de su Iglesia, que él es el Mesías, pero a veces sus enseñanzas pueden generar conflicto o resistencia y cuando esto sucede nos alejamos de Jesús y los demás y es ahí cuando más necesitamos beber de su agua viva en la palabra, oración y los sacramentos. Pidamos la gracia de pedir al Señor aquello de lo que más tenemos sed y encontremos en él todo lo que necesitamos. ¡María, Reina de la Paz, protégenos de la guerra!

Dios nos bendiga.








viernes, 1 de abril de 2022

Llamados a ser fieles al Señor

 Viernes de la Cuarta Semana de Cuaresma

«Pero yo sí lo conozco, porque procedo de él y él me ha enviado» Juan 7,29

Hoy Jesús nos invita a tener una relación filial con el Dios Padre como él la tiene. La fidelidad de Jesús al Padre es algo que desafía a muchos que creen conocerlo y es por eso que a lo largo del tiempo muchos lo seguirán, algunos se abandonarán, otros lo acosarán pidiendo su arresto y muerte. Dios ha cumplido en la persona de Jesús que quién sea acosado por seguir las enseñanzas de Jesús serán reconocidos como hijos de Dios. Pidamos la gracia de ser fieles aun cuando somos acosados como lo fue Jesús, sabiendo que el Señor está cerca de nosotros, vela por nosotros y redime a los que son sus siervos fieles.
¡María, Reina de la Paz, protégenos de la guerra!

Dios nos bendiga.