Viernes de la Tercera Semana de Pascua
«El que come de este pan vivirá para siempre» Juan 6,58
Hoy Jesús nos invita a reconocer que solo él nos puede dar vida eterna. La vista física es el sentido que nos permite ver la belleza de la creación y ver hacia dónde vamos para que podamos llegar a nuestros destinos de manera segura, pero la visión espiritual es aún más profunda y poderosa porque nos da la capacidad de reconocer a Dios su amor, poder, verdad y presencia. En nuestro caminar con Dios, a veces somos capaces de ver claramente los dones de Dios y sus planes para nuestras vidas. Pero otras veces no somos capaces o no queremos ver su mano providencial sobre nosotros, así como le sucedió a los judíos del tiempo de Jesús que creían ver bien al cuestionar cómo Jesús podía darles de comer su cuerpo y beber su sangre, pero Jesús más bien los invito a ver con nuevos ojos y a creer que si comían su cuerpo y bebían su sangre tendrían vida eterna. Pidamos hoy la gracia de abrir los ojos de nuestro corazón a la verdad, para que podamos tener la visión espiritual perfecta de que solo Jesús presente en la Santa Eucaristía nos puede dar vida eterna. Amén
Dios nos bendiga.
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