Miércoles de la Primera Semana del Tiempo Ordinario

«Por la mañana, cuando todavía estaba muy oscuro, se levantó y salió a un lugar desierto, y allí oró» Marcos 1,37

Señor, ayúdame a ponerte primero en mi vida dándote lo mejor de mi tiempo. Ayúdame a no rendirme a la pereza, sino a levantarme temprano en la mañana para que pueda estar contigo. Te necesito en mi vida. Ayúdame a experimentar tu amor para poder compartirlo con otros. Ayúdame a entregarme a tu plan de salvación y a alcanzar a aquellos que te están buscando. Ayúdame a tener hambre solo por ti para que puedas saciar mi hambre. Amén.

Dios nos bendiga.