Memoria de Santa Mónica
«Estén pues, preparados, porque no saben ni el día ni la hora» Mateo 25,13
Hoy Jesús nos invita a estar atentos y preparados para cuando llegue el glorioso día de encontrarnos con él. Pero esperar al Señor no significa que estemos físicamente despiertos en todo momento, sin dormir, sino más bien adoptar una disposición y un entusiasmo por la segunda venida de Cristo como los niños que esperan ansiosamente la mañana de Navidad. Pidamos hoy la gracias de mantener nuestras lámparas encendidas con el fuego del amor y la confianza en el Señor siguiendo el ejemplo de perseverancia de Santa Mónica. Amén
Santa Mónica, ruega por nosotros.
Dios nos bendiga.
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