Lunes de la Primera Semana de Cuaresma
«Yo les aseguro que, cuando lo hicieron con el más insignificante de mis hermanos, conmigo lo hicieron» Mateo 25,40
La Cuaresma es un viaje que dura 40 días, y después del Miércoles de Ceniza hemos tenido varios días para irnos adaptando poco a poco. Pero el objetivo final de estos 40 días es preparar nuestro corazón para la Pascua y el Evangelio de hoy iluminan el camino que recorremos para alcanzar nuestra meta. Jesús predice el juicio de las naciones. Cuando el Hijo del Hombre venga en gloria, seremos separados según cómo tratamos a los más necesitados. Cuando alimentamos al hambriento, dar de beber al sediento, damos la bienvenida al extraño, vestimos al desnudo, cuidamos al enfermo, visitamos al encarcelado, en verdad estamos sirviendo a Dios mismo. Jesús nos está enseñando no sólo a preocuparnos por el prójimo que vemos con regularidad, sino también por los más ignorados en la sociedad. En última instancia, para que nuestro viaje cuaresmal tenga éxito debe incluir formar una relación justa con Dios y nuestro prójimo, reconociendo que incluso los marginados son nuestros vecinos. Amén.
Dios nos bendiga.
No hay comentarios:
Publicar un comentario