«Los últimos serán los primeros, y los primeros, los últimos» Mateo 20,16
Jesús contó la parábola de los viñadores cuando se dirigía a Jerusalén, donde sería crucificado, moriría y resucitaría para traer la salvación y transformar el mundo. Si seguimos fielmente a Jesús, también tendremos el privilegio de servirle sin reservas en su viña. Pidamos hoy al Señor que inflama nuestro corazón con el deseo de servirte devotamente en tu viña, y líbranos del error de compararnos con otros que tú también has llamado. Amén.
Feliz domingo.
Dios les bendiga.
No hay comentarios:
Publicar un comentario