«Eviten toda clase de avaricia, porque la vida del hombre no depende de la abundancia de los bienes que posea» Lucas 12,15
Hoy Jesús nos recuerda que no es malo entonces tener riquezas. Que peligro para nuestra vida de gracia está en acumular riquezas, porque tener sólo por atesorar, empobrece nuestra vida y priva a los demás de los bienes que han sido creados para todos. Es por eso que la belleza de la vida cristiana consiste en adquirir, por medio de la gracia, la capacidad de compartir. Porque solo siendo libres podremos experimentar la paz y la alegría perfecta que Jesús nos ofrece. Amén.
¡Feliz semana!
Dios nos bendiga.
No hay comentarios:
Publicar un comentario