Llamados a descubrir en las cosas sencillas la presencia del reino de Dios

Martes de la Trigésima Semana del Tiempo Ordinario

«¿Con qué podré comparar al Reino de Dios?» Lucas 13:20

Jesús hoy nos invita a descubrir en las cosas sencillas la presencia del reino de Dios. Como bautizados somos invitados a considerar el Reino de Dios con una perspectiva amplia como una semilla de mostaza o la levadura que se pone en la harina, estas ideas evocan la sencillez de los comienzos del Reino de Dios irrumpió en el mundo limitado y físico del tiempo y el espacio. Pese a la enardecida oposición que encontró, el Reino de Dios continuará en este mundo hasta que Cristo Jesús regrese en toda su gloria. Pidamos hoy la gracia de descubrir que en las cosas pequeñas que hacemos a diario en la presencia de Dios pueden tener efectos profundos y maravillosos que pueden transformar el mundo entero. Amén

Dios nos bendiga.

Llamados a ser liberados y sanados por Jesús

Lunes de la Trigésima Semana del Tiempo Ordinario 

«Mujer, quedas libre de tu enfermedad» Lucas 13,12

Hoy Jesús nos recuerda que él quiere liberarnos y sanarnos de todo lo que nos aflige. La mujer encorvada del Evangelio de hoy no buscaba ser sanada pero ese día Jesús estaba en la sinagoga y restauró su salud y transformó su vida. Muchos hoy a diferencia de la mujer encorvada buscan curación física y el Señor quiere curar sus emociones, hay personas que piensan que algunas cosas son difíciles de curar incluso para el Señor, o que pueden ser curadas solamente si siguen ciertos pasos, tal vez incluso pueden pensar que Dios ya no cura hoy, o que no son merecedores de ser curados, pero hoy el Señor sigue sanando y liberando, él solo nos pide que nos acerquemos a él con fe. Pidamos que mientras continuamos hoy tengamos la gracia de confiar en que el Señor nos dará lo que nosotros verdaderamente necesitamos. Amén

Dios nos bendiga.

Llamados a encontrar en Dios la fuente de nuestro amor al prójimo

Domingo de la Trigésima Semana del Tiempo Ordinario 

«Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón… y tu prójimo como a ti mismo » Mateo 22,37-39 

Hoy Jesús nos llama a encontrar en Dios la gracia para vivir el mandamiento del amor. Como bautizados estamos llamados a encontrar en Dios la fuente del verdadero amor porque si queremos amar a nuestro prójimo adecuadamente, debemos comenzar por buscar a Dios y su ayuda primero y luego derramar ese amor sobre los demás. El corazón del hombre ha sido creado para amar. El problema comienza cuando tenemos que elegir un amor: ¿A quién amar? ¿Cómo debe ser mi amor?  Pidamos la gracia de que nuestro amor a Dios pase por nuestro amor a los demás y viceversa especialmente con aquellos que nos cuesta amar. Amén

Dios nos bendiga.

Llamados a la santidad siguiendo El ejemplo de los santos apóstoles

 Fiesta de los Santos Simón y Judas, Apóstoles

«Llamó a sus discípulos, eligió a doce de entre ellos y les dio el nombre de apóstoles» Lucas 6,13

La fiesta de los santos apóstoles Simón y Judas nos recuerda que todos somos candidatos a la santidad desde el día de nuestro bautismo. Porque la santidad no se trata tanto de realizar grandes hazañas por la fe, sino cultivar una relación de amor puro y sincero a Dios y al prójimo. Simón y Judas fueron dos de los apóstoles de Jesús que compartieron su vida cotidiana con él y aprendieron a vivir, amar y perdonar como él lo hacía, nosotros estamos llamados a hacer lo mismo. Pidamos hoy por intercesión de los santos apóstoles Simón y Judas que el Señor conceda la gracia para imitarlos porque queremos ser más como el Señor, viendo con humildad y fidelidad día tras día.
Santos Simón y Judas, Apóstoles, rueguen por nosotros.

Dios nos bendiga.

Llamados a hacer lo que es correcto y bueno

Viernes de la Vigésima Novena Semana del Tiempo Ordinario

«¿Por qué, pues, no juzgan por ustedes mismos lo que les conviene hacer ahora?» Lucas 12,57

Hoy Jesús nos invita a hacer lo que es correcto y bueno. Si nos preguntaran si sabemos qué es lo correcto que decir y hacer en la mayoría de las situaciones diríamos que sí porque en la mayoría de nuestras interacciones diarias con familiares, amigos, compañeros de trabajo o personas con las que nos encontramos, sabemos cómo actuar y qué se espera de nosotros, sabemos lo que debemos hacer, pero  el pecado se impone en nuestras elecciones y no hacemos lo que deberíamos hacer, porque el pecado es real y podemos saber qué es lo correcto pero aun así fallar y no hacerlo, sólo siguiendo a Cristo y la guía de la Iglesia podemos elegir intencionalmente la dirección correcta de nuestras vidas. Jesús nos recuerda en el Evangelio la urgencia de convertir nuestras acciones y volvernos hacia Dios, ofrece nuestros pecados al Señor que quiere quitárnoslos y perdonarnos. Pidamos hoy la gracia de alcanzar lo que Dios ha diseñado para nosotros y alejarnos de la tentación de pecar. Amén

Dios nos bendiga.

Llamados a dejar arder en nosotros el fuego del amor y la paz de de Jesús

Jueves de la Vigésima Novena Semana del Tiempo Ordinario

«No he venido a traer la paz, sino la división» Lucas 12,51

Hoy Jesús nos ofrece el fuego de su amor, el fuego de su paz. Aunque el evangelio de hoy puede ser difícil de entender porque nos hace sentir incómodos al cuestionar nuestra relación más íntima, personal y hasta familiar, pero como bautizados estamos llamados a vivir de una manera que se ajuste a lo que Jesús nos llama a hacer y esto puede desafiarnos y desafiar a los demás. Jesús nos señala la realidad de que cuando decidimos convertirlo en el centro de nuestra vida, es una decisión audaz que nos cambia la vida, es porque reconocemos que él es quien dice ser: el camino, la verdad y la vida. Pidamos hoy la gracia de permitir que el fuego de Jesús arda más intensamente dentro de nosotros para que el gozo del discipulado despierte un deseo, un interés y un compromiso en los demás. Amén

Dios nos bendiga.

Llamados a estar preparados para la venida del Señor y para recibirlo con alegría

Miércoles de la Vigésima Novena Semana del Tiempo Ordinario

«Estén preparados, porque a la hora en que menos lo piensen, vendrá el Hijo del hombre» Lucas 12, 40

Hoy Jesús nos recuerda que debemos estar preparados para su venida y para recibirlo con alegría. Como bautizados debemos vivir nuestra vida para el Señor y continuando con su trabajo, el Señor comprende nuestra tendencia humana a relajarnos, y nos advierte de las consecuencias si lo hacemos ya que él quiere que su venida sea un momento alegre y maravilloso para nosotros. Ninguno de nosotros podrá evitar que el Señor venga sorpresivamente, ninguno de nosotros sabe cuándo vendrá Jesús, podría ser mañana o la próxima semana o dentro de cinco minutos. Pidamos la gracia de estar preparados para hacer lo que debemos hacer con amor viviendo para el Señor y preparados para su venida. Amén

Dios nos bendiga.

Llamados a estar preparados para el regreso del Señor

Memoria Opcional de San Antonio María Claret, Obispo

«Estén listos, con la túnica puesta y las lámparas encendidas» Lucas 12,35 

Hoy Jesús nos recuerda que bienaventurados aquellos que están preparados para su regreso. Como discípulos del Señor debemos estar vigilantes en nuestras vidas de fe ahora esforzándonos por perfeccionar dentro de nosotros lo que Dios ya nos ha dado, no necesitamos salir a conseguir nada de lo que este mundo nos ofrece porque Jesús nos recuerda que ya tenemos todo lo que necesitamos a través de él y de la Iglesia. Pidamos la gracia por intercesión de San Antonio María Claret de revestirnos del amor y misericordia de Dios y disipar cualquier oscuridad en el mundo con nuestro testimonio de la Buena Nueva y así estar bien preparados para la venida de Cristo y la plenitud de vida en el Reino al que estamos invitados. San Antonio María Claret, ruega por nosotros.

Dios nos bendiga.

Llamados a reconocer nuestra dependencia de Dios

Memoria de San Juan de Capistrano Presbítero

«Eviten toda clase de avaricia, porque la vida del hombre no depende de la abundancia de los bienes que posea» Lucas 12,15

Compartir nuestros dones es un signo de nuestra fe. Cuando escuchamos el Evangelio de hoy, es posible que tengamos varias reacciones diferentes. Podríamos apresurarnos a desvincularnos de las acciones codiciosas del hombre rico. O podríamos identificarnos con su deseo de planificar el futuro. ¿No queremos todos jubilarnos algún día? Seguramente Jesús no nos condenaría por estar preparados. ¿Qué significa ser rico en lo que le importa a Dios?

La riqueza tiene dos niveles de significado, con respecto a Dios, en el Evangelio de Lucas. La primera es como respuesta de la fe. Vemos en nuestra primera lectura que la fe de Abraham le es contada como justicia. Pero, escribe Pablo, él no es el único que recibirá crédito por su fe. Abraham tenía fe en las promesas que Dios le había hecho. Si creemos en la fidelidad de Dios hacia nosotros a través de Cristo, si creemos en la muerte y resurrección de Cristo, recibiremos el beneficio de la justificación.

El segundo significado de riqueza en el Evangelio de Lucas se refiere al concepto de compartir posesiones en lugar de acumularlas sólo para uno mismo. Nuestra tendencia a acumular riquezas o atesorar posesiones puede reflejar ansiedad ante la fragilidad de la vida. Pensamos tontamente que cuanto más poseemos, más seguros estaremos de la catástrofe. El evangelio de hoy nos muestra que la vida misma es un don de Dios y nos la pueden quitar en cualquier momento. Ninguna cantidad de cosas puede protegernos de la realidad de la muerte.

Estos dos niveles de significado nos ayudan a comprender lo que significa vivir en riqueza y cómo debemos abrazar una comprensión más profunda de la riqueza a la luz de nuestra fe. La confianza y la fe en Dios nos brindan una recompensa como ninguna otra. Y cuando compartimos generosamente con los demás, demuestra que reconocemos nuestra dependencia de Dios por todo lo que tenemos, incluso la vida misma. San Juan de Capistrano, ruega por nosotros.

Dios nos bendiga.

Llamados a dar lo mejor que tenemos a Dios

Vigésimo Noveno Domingo del Tiempo Ordinario

«Den, pues, al César lo que es del César, y a Dios lo que es de Dios» Mateo 22,21

Hoy Jesús nos recuerda que somos de Dios y que solo a él le pertenecemos y que a él debemos darle lo mejor de nosotros. Como cristianos debemos ser responsables con nuestras obligaciones civiles pero nuestra principal lealtad es con Dios, amándolo con el corazón, alma y mente, dándole lo mejor que tenemos: nuestro tiempo, talento y tesoros, poniendo a Dios en primer lugar, antes que naciones o reinos, sistemas políticos o económicos, instituciones o ideologías. Pidamos la gracia de ser responsables con las cosas justas de este mundo, pero ser más leales a Dios a quien pertenecemos, ahora y siempre a quien debemos darle lo mejor que tenemos. Amén

Dios nos bendiga.

Llamados a reconocer que todo es un regalo de Dios

Sábado de la Vigésima Octava Semana del Tiempo Ordinario

«Todo aquel que me reconozca abiertamente ante los hombres, lo reconocerá abiertamente el Hijo del hombre ante los ángeles de Dios» Lucas 12,8

Hoy Jesús nos recuerda que todo es un regalo de Dios. Muchas veces caemos en la trampa de creer que todo depende de nosotros, esto sucede a menudo en nuestra vida cotidiana y en nuestra vida espiritual, a medida que sumamos las buenas obras y las prácticas piadosas que creemos que “nos llevarán al cielo”. En el Evangelio de hoy Jesús explica a sus discípulos que no necesitan prepararse para defenderse bajo la persecución, porque en el momento de la prueba, dice Jesús, el Espíritu Santo os enseñará... lo que debéis decir. Jesús nos recuerdan que debemos vernos a nosotros mismos y a los demás a través del lente de la gracia, esto no quiere decir que nuestras acciones sean intrascendentes, sino que Dios es Dios, Él es misericordia, justicia, paciencia y amor, Él está a cargo y es fiel y firme, esto es gracia. Pidamos la gracia de reconocer que todo es un regalo de Dios y que generosamente debemos el amor de Dios con los demás. Amén

Dios nos bendiga.

Llamados a conformar nuestra mente y corazón al de Jesús

Memoria Opcional de San Pablo de la Cruz, presbítero 

«No teman, pues, porque ustedes valen mucho más que todos los pajarillos» Lucas 12,7

Hoy Jesús nos recuerda que, en el día del juicio final, todo será conocido, particularmente nuestras actitudes y palabras sobre nuestro prójimo. A lo largo de nuestra vida, debemos buscar la gracia de los sacramentos y la oración para conformar nuestra mente y corazón al de Jesús, esto incluye cómo interactuamos con nuestro prójimo porque lo que hacemos a los más pequeños, se lo hacemos a Jesús. Como cristianos debemos reflexionar sobre nuestras relaciones unos con otros y del gran amor y cuidado que nuestro Padre tiene por cada uno de nosotros. Pidamos la gracia por intercesión de San Pablo de la Cruz que ese mismo amor y cuidado de Dios se desborden de nosotros hacia aquellos con quienes nos encontramos a diario. San Pablo de la Cruz, ruega por nosotros.

Dios nos bendiga.

Llamados a compartir el mensaje de amor y misericordia de Dios

Memoria de Santos Juan de Brébeuf e Isaac Jogues, Presbíteros, y Compañeros Mártires

«Ay de ustedes, doctores de la ley. Ustedes no han entrado y a los que iban a entrar les han cerrado el paso» Lucas 11,52 

Hoy Jesús nos recuerda que él ha venido con un mensaje del abundante amor y misericordia de Dios para todos los pueblos. El amor y la misericordia de Dios ya no era sólo para el pueblo elegido, sino que ahora está abierto a todos y ese era el problema de los fariseos con Jesús. El amor y la misericordia es un regalo de Dios, nunca ganado, simplemente aceptado y esa es la verdad central del Evangelio y sin embargo, siempre hay quienes buscan limitarlo y controlarlo o utilizarlo para sus propios fines. Pidamos hoy la gracia por la intercesión de los Santos Mártires Jesuitas de no limitar el amor, la justicia y el mensaje del Señor y que todo lo que hagamos se obra de nuestra fe en Cristo Jesús y su Evangelio.
Santos Mártires Jesuitas, rueguen por nosotros.

Dios nos bendiga.

Llamados a vangelizar curando el dolor y sufriento en el mundo

Fiesta de San Lucas, Evangelista

«La cosecha es mucha y los trabajadores pocos» Lucas 10,2

Esta fiesta de San Lucas evangelista nos recuerda que la mies es abundante pero los trabajadores pocos. Hoy somos más de mil millones de católicos en el mundo es bastante diferente a ser uno de los 72 discípulos, pero aun así Jesús nos llama a la misma misión, porque la cosecha sigue siendo abundante y nuestro llamado es más crítico que nunca, hoy más que nunca estamos llamados a ver el dolor y el sufrimiento en el mundo y trabajar para curarlo, estamos llamados a anunciar que el reino de Dios está cerca con el ejemplo de nuestra vida. Pidamos la gracia por intercesión de San Lucas podamos reconozcamos nuestro llamado a evangelizar, independientemente de nuestra posición en la vida y que reconozcamos la abundante cosecha que tenemos ante nosotros y el gozo que conlleva ser trabajador.
San Lucas, ruega por nosotros.

Dios nos bendiga.

Llamados a pensar y actuar correctamente

Memoria de San Ignacio, Obispo y Mártir

«Ustedes, los fariseos, limpian el exterior; en cambio, el interior de ustedes está lleno de maldad» Lucas 11,39 

Hoy Jesús nos desafía a usar el don de la razón que nos ha dado Dios. El pensamiento correcto nos lleva a Dios si actuamos en consecuencia. Por otro lado, la ignorancia y el pensamiento confuso pueden alejarnos de Dios y pueden usarse para justificar la codicia, el orgullo o las acciones dañinas que causan mucho sufrimiento en nuestro mundo especialmente cuando pensamos que no somos dignos del amor de Dios, o cuando pensamos que otros no son dignos del amor de Dios. Pidamos por la intercesión de San Ignacio la gracias de exponer cualquier oscuridad dentro y alrededor de nosotros para pensar y actuar correctamente.
San Ignacio, ruega por nosotros.

Dios nos bendiga.

Llamados a ser un signo de amor y de esperanza para los demás

Memoria Opcional de Santa Margarita María Alacoque, Virgen

«La gente de este tiempo pide una señal, pero no se le dará más señal que la de Jonás» Lc 11,29 

Hoy Jesús nos invita a mantener la esperanza a ser un signo del amor de Dios para los demás en medio de tanta perversidad. Cada generación tiene su propia cuota de maldad; pero el Señor derrama su gracia sobre todas ellas, y cada una responde a esta gracia a su propia manera, generación tras generación, Dios continúa congregando a su pueblo para concederle perdón, sanación y amor. Pidamos la gracia por intercesión de Margarita María Alacoque de ser una señal del amor de Dios en medio del pecado, división, odio y violencia que nos rodea, recordando que solo hace falta abrir los ojos y verlo.
Santa Margarita María Alacoque, ruega por nosotros.

Dios nos bendiga.

Llamados al banquete abundante del Señor

Domingo de la Vigésima Octava Semana del Tiempo Ordinario 

«Tengo preparado el banquete; todo está listo. Vengan a la boda» Mt 22:4

Hoy Jesús nos invita a servir a Dios, quien primero nos ha servido a nosotros. La Parábola del banquete de bodas del hijo del rey nos presenta la impactante realidad de quien no acepta siempre la abundancia de Dios. A veces estamos demasiado ocupados o pensamos que no somos dignos de la invitación del Señor pero no hay nada que impida que Dios comparta su abundancia con nosotros, solo nuestra indisposición. Pidamos la gracia de responder a la invitación de Dios y compartir su abundante generosidad con todos. Amén.

Dios nos bendiga.

Llamados a poner práctica la Palabra de Dios como la Virgen María

Memoria Opcional de San Calixto I, Papa y Mártir

«Dichosos todavía más los que escuchan la palabra de Dios y la ponen en práctica» Lucas 11,28

Hoy Jesús nos invita a escuchar y poner en práctica la Palabra de Dios siguiendo el ejemplo de su Madres. Hoy es un desafío escuchar la palabra de Dios y aceptarla a pesar de lo que esté sucediendo en tu vida, por eso debemos mantener nuestros ojos fijos en nuestro Padre celestial, tratando de ver nuestra vida a través de sus ojos. Pidamos por intercesión de San Calixto Papa y Mártir seguir el ejemplo de la Virgen María para comprender que ser bendecidos no significa que en nuestra vida siempre saldrá como queramos, porque Dios tiene una palabra y un plan para nosotros aunque no lo entendamos.
San Calixto, ruega por nostros.

Dios nos bendiga.

Llamados a expulsando los demonios de la pobreza, la guerra y la codicia

Viernes de la Vigésima Séptima Semana del Tiempo Ordinario

«Todo reino dividido por luchas internas va a la ruina y se derrumba casa por casa» Lucas 11,17

Jesús nos recuerda que inspirados por el Espíritu Santo, podemos expulsar a los demonios de hoy y trabajar por la plenitud del reino de Dios. Como discípulos del Señor tenemos la tarea de continuar haciendo su obra expulsando los demonios de la pobreza, la guerra, la codicia e inspirados por el Espíritu Santo recibiremos la fuerza para llevar el amor de Dios a un mundo que a veces puede parecer que no lo quiere. Pidamos la gracia de que siempre acudamos al Espíritu Santo en busca de fortaleza para continuar con nuestra misión como discípulos del Señor. Amén

Dios nos bendiga.

Llamados a buscar, llamar y recibir el don del Espíritu Santo

Jueves de la Vigésima Séptima Semana del Tiempo Ordinario

«Pidan y se les dará, busquen y encontrarán, toquen y se les abrirá» Lucas 11,9

Hoy Jesús nos llama a atrevernos a pedirle a Dios el don del Espíritu Santo. Dios está siempre y en todo lugar dispuesto a darnos lo que necesitamos; todo lo que tenemos que hacer es pedirlo. Dios sabe lo que necesitamos, incluso más de lo que un padre sabe las necesidades de sus hijos. Jesús nos enseña a los hijos de Dios cómo pedirle a nuestro Padre por nuestras necesidades con persistencia, porque si pedimos, buscamos y llamamos, recibiremos, encontraremos y experimentaremos una puerta abierta. Pidamos hoy la gracia de ser audaces y atrevámonos a pedir lo que realmente necesitamos, el Espíritu Santo que enciende en nosotros el fuego de tu amor y nos guíe en todo lo que hacemos. Amén

Dios nos bendiga.

Llamados a centrar nuestra visión en Dios por medio de la oración

Miércoles de la Vigésima Séptima Semana del Tiempo Ordinario

«Jesús les dijo: Cuando oren, digan: Padre, santificado sea tu nombre, venga tu Reino» Lucas 11,2

Hoy Jesús nos recuerda que debemos centrarnos en la visión de Dios para el mundo, no en nuestra propia visión. Seguro que hemos rezado el Padre Nuestro innumerables veces en nuestra vida y quizás se haya convertido más en un hábito que en una oración que contemplamos profundamente. Pero el Señor nunca flaquea en su efusión de amor y cuidado por nosotros. Es un Dios clemente y misericordioso, lento para la ira, rico en clemencia, reacio a castigar. Pidamos hoy a Jesús la gracia de que la oración del Padre Nuestro moldee nuestros corazones para que podamos ver a Dios como Padre y centrarnos en su reino, no en el nuestro. Amén

Dios nos bendiga.

Llamados a poner a Jesús como el centro de nuestra vida

Martes de la Vigésima Séptima Semana del Tiempo Ordinario

«María escogió la mejor parte y nadie se la quitará» Lucas 10,42

Jesús nos enseña que cuando nuestra vida lo tiene a él como centro nuestro trabajo se convierte en una gracia que fluye hacia Dios y los demás. Los problemas de nuestro mundo y de nuestras vidas ciertamente pueden causarnos ansiedad, como cristianos debemos ser diligentes en el desempeño de nuestros deberes diarios y diligentes en la oración y en pasar tiempo con nuestro Señor, evitando que el estrés del mundo llene nuestro corazón y perder de vista el reino de Dios y lo que el Señor quiere hacer en nuestras vidas. Pidamos hoy la gracia de ordenar nuestra vida en Dios, pasando tiempo con él y aprendiendo su voz para que nuestro trabajo haga presente el reino de Dios en nuestra vida y la de los demás. Amén

Dios nos bendiga.

Llamados a ser bondadoso y misericordioso con todos

 Lunes de la Vigésima Séptima Semana del Tiempo Ordinario

«Entonces Jesús le dijo: Anda y haz tú lo mismo» Lucas 10,37

Jesús nos enseña que nuestro Dios es bondadoso y misericordioso con todos. La esencia de la historia del Buen Samaritano es la misericordia de Dios, un judío que fue víctima de robo y golpiza, y ignorado por otros judíos como él preocupados más por la pureza y la ley religiosa que por la compasión, pero que fue ayudado por un samaritano quien acudió en su ayuda y le proporcionó consuelo y refugio, acciones curativas como las de Jesús. Pidamos hoy la gracia de encontrar en nosotros la capacidad de actuar como el buen samaritano como nos encomienda Jesús. Amén

Dios nos bendiga.

Llamados a dar buenos frutos

Domingo de la Vigésima Séptima Semana del Tiempo Ordinario

«Les será quitado a ustedes el Reino de Dios y se le dará a un pueblo que produzca sus frutos» Mateo 21,43

Hoy Jesús nos recuerda que Dios nos llama a dar buenos frutos y a ser buenos administradores de su viña. Nosotros como bautizados hemos sido llamados a trabajar en la Viña del Señor y por lo tanto somos responsables de que produzca muchos frutos. Dios nos da todo lo que necesitamos para hacer que el reino de Dios sea visible en nuestro mundo y para que dé abundantes frutos. Pidamos hoy la gracia de  comprometernos a dar buenos frutos como viña de Dios y a utilizar nuestras habilidades y oportunidades para difundir el mensaje del reino de Dios a las personas con las que nos encontramos todos los días. Amén

Dios nos bendiga.

Llamados a responder con generosidad como María a la llamada del Señor

 Memoria de Nuestra Señora del Rosario

«Dichosos los ojos que ven lo que ustedes ven» Lucas 10,22 

Hoy Jesús nos recuerda que quien responda a su llamado encontrarán gran gozo al hacer la voluntad del Padre. Así como Jesús buscó la voluntad del Padre en oración, nosotros también debemos dedicar tiempo en oración buscando la voluntad del Padre. Jesús nos promete que, con su ayuda, podremos tener ojos y oídos capaces de conocer la voluntad del Padre, así como lo hizo su Madre. Pidamos hoy por intercesión de la Virgen Maria que siempre como ella busquemos la ayuda de su hijo para conocer y hacer la voluntad del Padre en nuestras vidas. Nuestra Señora del Rosario, ruega por nosotros.

Dios nos bendiga.

Llamados al arrepentimiento constante

Viernes de la Vigésima sexta Semana del Tiempo Ordinario

«El que me rechaza a mí, rechaza al que me ha enviado» Lucas 10,16

Hoy Jesús nos llama al arrepentimiento y nos recuerda que él está presente para ayudarnos. Arrepentirse es reconocer y lamentar el error hasta el punto de cambiar nuestra conducta y acciones, y desarrollar nuevos hábitos mentales y espirituales, el arrepentimiento es esencial para tener una buena relación con Dios, las ciudades en las que Jesús está realizando milagros están fallando en el arrepentimiento. Pidamos hoy la gracia de reconocer que Dios está siempre presente para ayudarnos a ver lo que debemos corregir y que nos conceda la madurez y la humildad para hacerlo. Amén

Dios nos bendiga.

Llamados a escuchar practicar y compartir la palabra de Dios

Memoria Opcional de Santa Faustina Kowalska, Virgen

«Curen a los enfermos que haya y díganles: Ya se acerca a ustedes el Reino de Dios» Lucas 10,9

En el Evangelio, Jesús envía a sus discípulos como testigos vivos de la palabra de Dios. Dan testimonio de la palabra de Dios como portadores de paz mediante la curación y el anuncio de que el reino de Dios estaba cerca. La palabra de Dios en la Sagrada Escritura está disponible para nosotros en cualquier momento y lugar, Palabra de Dios es viva y nos llama a la acción, nos anima con alegría y ofrece esperanza y misericordia a los demás. Pidamos la gracia por intercesión de Santa Faustina la gracia de que cada vez que escuchamos la Palabra de Dios respondemos con generosidad aunque no parezca una buena noticia y guardemosla en nuestro corazón hasta que lo parezca.
Santa Faustina Kowalska, ruega por nosotros.

Dios nos bendiga.

Llamados a seguir a Señor siguiendo el ejemplo de San Francisco de Asís

Memoria de San Francisco de Asís, Religioso

«Jesús le dijo: Sígueme» Lucas 9,59

Hoy celebramos la fiesta de San Francisco de Asís quien era un joven inquieto, inseguro de su vocación, pero que se atrevió a preguntar al Señor que quería hacer con su vida y él recibió la llamada a reconstruir el cuerpo místico de Cristo, la Iglesia. Hoy Jesús también nos ofrece respuestas a cada uno de nosotros invitándonos a seguirle no importando el lugar en el que nos encontremos. Pidamos hoy la gracia de seguir el ejemplo de San Francisco entregándonos por completo a Dios que nos lo ha dado todo. San Francisco de Asís, ruega por nosotros.

Dios nos bendiga.

Llamados a seguir a Jesús reconociendo su presencia entre nosotros

Martes de la Vigésima Sexta Semana del Tiempo Ordinario

«Jesús tomó la firme determinación de emprender el viaje a Jerusalén» Lucas 9,51

Hoy Jesús nos invita a acoger su mensaje y compartirlo con los demás. Los samaritanos como muchas personas hoy se niegan a recibir a Jesús y las divisiones entre ellos los ciegan ante la presencia de Cristo entre ellos. Como discípulos del Señor debemos hacer lo mejor que podemos para caminar con él, para recibir su mensaje y compartirlo con los demás. Pidamos hoy la gracia de reconocer a Jesús presente en todo lo que vivimos a diario y compartir esa presencia con los demás. Amén

Dios nos bendiga.

Llamdos a confiar que Dios nos cuida por medio de sus ángeles

Memoria de los Santos Ángeles Custodios

«Yo les digo que sus ángeles en el cielo, ven continuamente el rostro de mi Padre» Mateo 18,10

Jesús nos recuerda que Dios nos cuida y guía a través de nuestro ángel de la guarda. La celebración del memorial de los Santos Ángeles Custodios nos recuerda que la misión de ellos es ayudarnos cuando necesitamos ayuda. La Iglesia nos enseña que los ángeles superan en perfección a todas las criaturas visibles y sirven a Dios en muchas capacidades: adorándolo, entregando mensajes a la humanidad y como nuestros ángeles guardianes. Pidamos hoy por intercesión de los Santos Ángeles Custodios la gracia de confiar que Dios cuida de cada uno de nosotros por medio de ellos, para que cuidemos a nuestros hermanos. Santos Ángeles Custodios, rueguen por nosotros.

Dios nos bendiga.

Llamados a hacer con amor la voluntad del Señor

Domingo de la Vigésima Sexta Semana del Tiempo Ordinario

«Hijo, ve a trabajar hoy en la viña» Mateo 21,28

Hoy Jesús nos recuerda que obedecer a Dios implica cumplir sus exigencias, a veces duras e imprevisibles en medio de este mundo secularizado y relativista. Muchas veces nuestras prácticas religiosas pierden su valor cuando nos procuran seguridades humanas y beneficios materiales, la parábola de los dos hijos nos recuerda que solo entrarán en el Reino de los cielos los que hace la Voluntad de Dios.  Pidamos hoy la gracia de hacer la voluntad de Dios continuando la misión de Jesús cumpliéndola con amor libres de las ataduras y seguridades humanas. Amén

Dios nos bendiga.