jueves, 11 de agosto de 2022

Llamados a ser compasivo y misericordioso como nuestro Padre Celestial

Jueves de Decimonovena Semana del Tiempo Ordinario.

«Jesús le contestó: No sólo hasta siete, sino hasta setenta veces siete» Mateo 18,22

Hoy Jesús nos recuerda que el perdón de Dios no tiene límites y que así también debe ser nuestro perdón para los demás. La parábola del Evangelio de hoy es un fuerte recordatorio para los cristianos sobre la importancia del perdón. Cuando nos arrepentimos y volvemos a Dios, Dios nos ofrece gracia y compasión. No hay límite para el perdón de Dios y es por eso que aquellos que experimentan la gracia ilimitada de Dios deben mostrar a cambio un perdón ilimitado a los demás. Pidamos hoy la gracia de ser misericordiosos y compasivos los unos a otros para que nuestro mundo pueda convertirse en lugares de sanación y paz. Amén.

Dios nos bendiga.




No hay comentarios:

Publicar un comentario