Memoria de los Primeros Santos Mártires de la Iglesia de Roma
«Jesús extendió la mano y lo tocó, diciéndole: Sí quiero, queda curado» Mateo 8,3
Jesús nos recuerda que siempre podemos acudir con confianza a él cuando lo necesitemos. Así como el Señor llamó y sanó al leproso, nos ha llamado desde el día de nuestro bautismo, suscitando mártires y santos para su gloria, con la esperanza de que también nosotros estemos un día con él en el paraíso. Pidamos hoy por la intercesión de los Primeros Santos Mártires de la Iglesia de Roma la gracia de la paciencia para lo que Dios nos ha prometido, la fe para acercarnos a él por lo que necesitamos y la fortaleza para continuar trayendo luz y bondad a cualquier forma de oscuridad y mal que encontremos. Santos Primeros Mártires de la Iglesia de Roma, rueguen por nosotros.
Dios nos bendiga.
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